Esta entrada va a ser complicada por dos motivos: primero, estoy escribiendo esto a las 2 de la mañana en mi casa y desde el móvil; y segundo, lo que voy a decir es complicado de expresar y más en estas circunstancias.
Lo primero decir que estoy viviendo un verano extraño. Solo llevo una semana de vacaciones desde que acabó mi primer año de carrera... que se dice muy pronto. Y siento que mi verano va a ser poco aprovechado, como siento que está mi tiempo libre cada vez que dispongo de él.
Los días son monótonos y no espero que el día que le sigue a este cambie lo más mínimo, a menos que me busque yo las migas para hacerlo diferente.
Ya empieza hacer mella la soledad del corazón, cuando los amigos y el sexo sin compromiso no te basta. Cuando tu mente y tu "patata" te pide algo más. Y por desgracia tú tampoco puedes dárselo porque no sabrías decir el qué le hace falta con exactitud.
Las cervezas, los chupitos, las risas y los buenos ratos en el bar con los colegas ya no te sirven para evadirte. La lectura no te distrae, el cine y la televisión te aburre, internet se hace muy visto y sin información nueva.
¿ cómo matas el tiempo entonces?
Ando escribiendo esto sin orden alguno, no tiene sentido ni al derecho ni al revés pero necesitaba contarlo, aunque sea desde mi lugar recóndito en la cama con el móvil entre las manos y el fresco veraniego entrando por la ventana con suavidad pausada.
Vida, comienzas a agobiarme con tus momentos y emociones vacías de toda importancia. Quiero sentir y vivir algo real. ¿Crees que podrías darme algo así?
Atte:
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