Dame cosas buenas, querido año.
Dame alegría y también penas, de esas que son tan necesarias para que continúe creciendo un año más. Cada año se crea un reseteo, empiezas de nuevo de 0.
Una nueva cuenta atrás. Un nuevo libro con páginas en blanco para rellenar, y todos esos clichés que circulan por la red.
Nuevas oportunidades para enmendar errores, para cumplir objetivos que se quedaron a medias...
Todo lo típico que suelen decirse en cada año nuevo que recibimos. Demos las gracias por lo que el año anterior nos dio y esperemos lo nuevo que nos viene.
Contigo comienza una nueva década. En la anterior ya crecí y en esta nueva que traes seguiré creciendo.
Dame fuerzas para comenzar esta nueva etapa, un año más, otros 365 días para el cambio. Ese que me atrapa por dentro y me transforma por fuera.
Vamos a por días, semanas y meses que marcarán mi historia. Que eclipsarán, copiarán o no llegarán al listón que dejó el 2019, o toda la década anterior.
¡FELIZ AÑO 2020 A TODOS!
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