Graduación: El discurso que nunca dí

Mañana me graduaré en secundaria, han sido 4 años intensos, pero llenos de emocionantes situaciones, fiestas, momentos, discusiones, unos tantos alegres y otros tantos un poco tristes.
Me hubiese encantado escribir el discurso de la graduación, hubiese sido mi sueño de estudiante de secundaria, pero me temo que no será posible..Todo no es posible en esta vida.
Me gustaría escribir aquí el discurso que habría hecho para leer ese día, delante de todos, y con un escacharrado micrófono, y creo que voy a exponerlo a continuación para todo aquel que quiera leerlo:


*Estos cuatro años en el instituto han sido cortos, pero se me hicieron intensos. Cuando entramos en primero todo era nuevo y emocionante, éramos los más pequeños del lugar, pero ya nos sentíamos más grandes y pensábamos que nos comíamos el mundo. Los profesores nos intimidaban al principio pero nos fuimos acostumbrando a ellos y ellos a nosotros. Nos costó adaptarnos al estilo de estudio de la secundaria, pero acabamos asimilando todo lo que pasaba a nuestro alrededor.

Conforme pasaban los años, y llegábamos a tercero, nos dimos cuenta lo mucho que habíamos crecido en estas paredes, y es que, realmente un adolescente forja su personalidad y su ambiente social aquí dentro, en el instituto donde pasa la mayoría del tiempo de su pubertad y juventud. Aun recuerdo cuando en el recreo rememorábamos entre risas anécdotas y momentos de nuestra vida en primaria, la compartíamos con nuestros nuevos compañeros, y ahora tras pasar por el instituto, tendremos más momentos que compartir con nuestros amigos y familiares y reír felices al recordar esos instantes.

Italia, ¿os acordáis? Mis compañeros de cuarto, la mayoría nunca habíamos volado, y jamás hemos comida tanta pasta en nuestras vidas, pero mereció muchísimo la pena, tanto lo que vimos, como lo que vivimos, como lo que sentimos, reímos…

Esa primera noche en Roma, donde los profesores nos hicieron caminar por una ciudad que desconocíamos bajo el cielo estrellado…

Esos ocho maravillosos días permanecerán en la memoria de aquellos que pudieron disfrutar de ese momento, y para otros, los momentos de diversión en las actividades de la semana cultural, las fiestas nacionales celebradas como el día de Andalucía, las bromas en clase y hasta los momentos menos graciosos como simulacros de incendios pero que por unos u otros se crea un ambiente divertido.

 Esta graduación es el resultado del esfuerzo de cada uno, pero también de todas las personas que estuvieron a nuestro lado durante el transcurso del curso, cada uno de ellos se encargó de implantar en nosotros, conocimientos y valores que permanecerán siempre.

Hoy nos despedimos de nuestra escuela para iniciar una nueva etapa; la experiencia vivida en estos años nos llena de entusiasmo para seguir adelante en lo que vayamos hacer tras este periodo de secundaria.

Cuando llegó el momento de elegir que camino tomar, "si letras o ciencias", hablando coloquialmente, sentimos una responsabilidad sobre nuestros hombros a la que nunca habíamos estado sometidos.

Ahora en cuarto, con las clases divididas, pero la misma unión que al principio, los chicos, ya son hombres, y las chicas, ya son unas mujeres que van a pasar a estudios superiores.

Permitidme una pregunta ¿Cómo os sentís al pensar que vais a dejar este lugar desde este momento? Yo no sabría describirlo, siento tristeza en parte porque hemos vivido mucho, echaré de menos a mis profesores, mis compañeros, y echaré de menos esos momentos divertidos y también a las clases intensas y monótonas. Momentos buenos y malos, parte de nuestra vida está aquí y aquí permanecerá. Muchos de los que estamos aquí quizás no volveremos a vernos nunca más, pero siempre estaremos presentes en los recuerdos de cada uno de nosotros y por otra parte me siento feliz porque estoy orgullosa de haber concluido mis estudios en este instituto y aprovechar lo aquí aprendido para tener nuevas metas y objetivos en el futuro.

Y ahora es todo tan familiar, los profesores, las asignaturas, los pasillos, las aulas, cada rincón del patio... y esto es lo que causa el problema de que a la hora de irse todo se haga mucho más difícil, esta familiaridad adquirida estos cuatro años nos ha unido al instituto, que para nosotros es ya una monotonía de la que nos cuesta separarnos, pero nuestros caminos continúan, y debemos agradecer a todos nuestros profesores, no solo de este curso, sino de estos cuatro años, por habernos acompañado en nuestro breve pero intenso periodo de tiempo entre estas paredes y por estar a nuestro lado apoyándonos en esta etapa de aprendizaje.

Y aquí, una servidora, alumna de este centro de la clase 4ºB, da las gracias a todos los presentes por escuchar mis palabras, y quiero desearles a todos un futuro agradable donde consigan sus objetivos y sean felices elijan lo que elijan.*

Estas serían mis palabras, realmente me hubiese gustado esmerarme más, pero las escribí sobre la marcha ahora mismo así que... espero que os agrade, y me digáis si debería haber insistido para leerlo en la ceremonia.